Uno de los aspectos más desafiantes del torneado con tornos de bancada fija es la gestión de vibraciones: saber cómo mantener las vibraciones bajo control y reducirlas al mínimo es esencial para asegurar la máxima calidad y precisión en el mecanizado.
Si no se controlan adecuadamente, las vibraciones pueden comprometer el acabado superficial de la pieza, acortar la vida útil de la herramienta, causar esfuerzos en el husillo y, en general, afectar negativamente todo el proceso de producción.
Cada detalle del ecosistema periférico que acompaña al torno de bancada fija puede marcar la diferencia. Con respecto al alimentador de barras, es importante evaluar las características del sistema de guía de barras y la distancia de instalación con respecto al torno. Pero hay otro factor clave que afecta de manera decisiva la estabilidad y la precisión durante el ciclo de mecanizado: la estructura del alimentador de barras.
Por qué la estructura del alimentador de barras es crucial para reducir las vibraciones

En las operaciones con tornos de bancada fija, la rigidez estructural del alimentador de barras es un elemento crucial para mantener las vibraciones bajo control. En particular, al mecanizar barras largas y pesadas, incluso una mínima deformación o inestabilidad puede generar vibraciones que se propagan a la herramienta y a la pieza, comprometiendo la calidad y la precisión.
Una estructura robusta, diseñada para garantizar la máxima rigidez, contribuye directamente a reducir las tensiones. Un cuerpo central reforzado, una base sólida y un anclaje al suelo estable son elementos que mejoran la capacidad de la instalación para absorber y amortiguar las vibraciones.
La estructura del alimentador de barras debe asegurar un comportamiento dinámico controlado, capaz de proteger el sistema máquina-herramienta-pieza en cada etapa del proceso de mecanizado. Cuanto más robusta y estable sea la estructura del alimentador, mejor podrá mantener toda la configuración la precisión, la eficiencia y la fiabilidad a lo largo del tiempo.
MAESTRO: estructura sólida para máxima estabilidad durante el mecanizado

Además del sistema de guía de barras flexible y la distancia de instalación optimizada, los alimentadores de barras IEMCA MAESTRO destacan por su estructura extremadamente robusta, diseñada para proporcionar máxima estabilidad en operaciones con tornos de bancada fija.
Cada elemento estructural del alimentador MAESTRO está concebido para minimizar las vibraciones, incluso con barras largas y pesadas. Como todos los alimentadores IEMCA, MAESTRO se construye sobre la plataforma Heavy Duty, que incluye un refuerzo adicional del bastidor inferior.
El cuerpo central del alimentador consiste en una viga tubular de alta sección y extra rígida, mecanizada con precisión para obtener superficies extremadamente exactas donde montar todos los componentes.
Gracias a esta estructura tan robusta, MAESTRO contribuye activamente a:
- Absorber hasta el 60 % de las vibraciones generadas por la barra en rotación;
- Proporcionar un nivel superior de robustez y estabilidad;
- Proteger el husillo del torno de esfuerzos dañinos;
- Garantizar altas prestaciones a lo largo del tiempo.
Robustez y estabilidad para máxima precisión en bancada fija
MAESTRO está diseñado para ofrecer robustez y estabilidad en las operaciones con tornos de bancada fija, y para minimizar las vibraciones gracias a su estructura extremadamente rígida.
¿Resultado? Vibraciones controladas, acabado superficial mejorado, mayor vida útil de la herramienta de corte, desgaste reducido del husillo y altas prestaciones, incluso con barras muy pesadas e imperfectamente rectas.
Descubre cómo MAESTRO puede ayudarte a alcanzar un nivel superior de precisión y eficiencia en el mecanizado de bancada fija: contáctanos ahora.